Para nadie es un secreto que la Avatar de James Cameron significó en un punto de inflexión para la industria y su relación con el 3D. Para el mismo director tampoco, quien considera que el legado más importante que dejó la película fue la normalización en salas de cine de la tercera dimensión. Sin embargo, con el pasar de los años, hemos experimentado una reducción significativa del formato lo que para muchos significaría que quizás todo se trató de una moda pasajera. Pero Cameron opina justamente lo contrario.
Durante la conferencia de prensa a la que asistió Cine PREMIERE con motivo del reestreno de Avatar en cines, James Cameron reflexionó sobre el legado su obra magna. Mientras que la gran mayoría podría pensar que la película ahora es pilar en el cine, sobre todo por su hazaña de ser la más taquillera de la historia, el cineasta en cambio recuerda los aspectos técnicos que hicieron de su obra la primera en marcar muchas casillas.
Para ejemplo está la cámara digital que se creó para capturar imágenes en tercera dimensión. Se trató de un artefacto premiado por la Academia. Más tarde otras películas lo adoptaron y también se llevaron el Óscar a la Mejor Fotografía. Cuando se le preguntó a Cameron cuál fue el legado de su película con respecto a los éxitos de taquilla de ahora, contestó lo siguiente:
«Diría que en general el 3D fue adoptado durante un período de tiempo. Avatar ganó la mejor fotografía con una cámara digital 3D. Ninguna cámara digital había ganado el Óscar a la Mejor Fotografía antes. Luego, dos de los tres años siguientes, las mismas cámaras fueron utilizadas por los directores de fotografía que ganaron el Óscar. Así que tienes 3 de 4 años en los que la Academia adoptó la cinematografía digital. Y 3 de esas películas fueron en 3D».
Desde luego todo recordamos cuáles son esas películas que ganaron el Óscar. Después de Avatar Martin Scorsese, Ang Lee y Alfonso Cuarón vieron el potencial del formato. Sus películas Hugo, Una aventura extraordinaria y Gravedad también significaron en un parteaguas para la tercera dimensión. El trío de películas se llevaron a casa el Óscar de Mejor Fotografía. Robert Richardson (Hugo), Claudio Miranda (Una aventura extraordinaria) y Emmanuel Lubezki (Gravedad) fueron los galardonados.
No obstante, hoy en día ya son pocas las películas que se proyectan en 3D. Desde luego la secuela de Avatar retornará la tradición, pero su director no cree que el formato esté terminado. Cameron opina que en la actualidad es algo común. El 3D de alguna manera cambió la forma en la que ahora tenemos una elección cuando nos paramos frente a la taquilla del cine.
«A la mayoría de la gente le parece que el 3D se ha terminado», continuó. «Pero realmente no ha terminado. Ahora es aceptado. Ahora es parte de sus elecciones cuando van al cine a ver una película de gran éxito. Lo comparo con el color. Cuando aparecieron las películas en color por primera vez, era algo grande. La gente iba a ver películas porque estaban en color. Creo que en la época de Avatar, la gente solía ir a ver películas porque estaban en 3D. Creo que tuvo un impacto en cómo eran las películas. Algo que ahora es aceptado y parte del espíritu de la época y cómo se hace».
Avatar regresará a las salas de cine el próximo 22 de septiembre. Desde luego en funciones en tercera dimensión. Los boletos ya están disponibles para su compra. Todo el evento ocurrirá como la antesala del estreno de la esperada secuela. Avatar: El camino del agua que estrenará en los cines el próximo 15 de diciembre.
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