Si algo han tenido en común las últimas dos películas de DC (Black Adam y Shazam 2), es el fracaso y la mala influencia de Dwayne Johnson. Aunque se entiende su injerencia en Black Adam, muchos no entienden cómo sus particulares intereses llevaron al fracaso de La furia de los dioses. Ahora, un nuevo reporte afirma que los caprichos de “La Roca” terminaron por hundir el potencial de ambos personajes.
De acuerdo con The Wrap, toco comenzó cuando Warner Bros confirmó a Johnson como protagonista de Black Adam. El personaje, que es un recurrente villano de Shazam en los cómics, fue promovido a protagonista de su propia película, algo muy diferente al plan que se tenía inicialmente (enfrentarlo a Shazam en su primera película). Gracias al éxito taquillero que tenía “La Roca” en ese entonces, el estudio aceptó darle control total sobre el uso del personaje. Pero no se imaginaban el error que eso significaría.
Según la información, Dwayne Johnson quería que el DCEU girara en torno a él y al Superman de Henry Cavill (de ahí el interés por tenerlo en Black Adam). Sin embargo, los planes del estudio eran diferentes. Hace unos meses, hubo ideas de introducir a Shazam en la escena post créditos de Black Adam. E incluso se barajeó la posibilidad de que la Sociedad de la Justicia apareciera en el final de Shazam 2. Pero La Roca se negó a que ambas cosas sucedieran. No quería que los personajes de “su franquicia” se mezclaran con el Shazam de Zachary Levi.
Dicha negativa orilló a que fueran dos personajes de Peacemaker los que aparecieran en la primera escena post créditos de Shazam 2. Así que no, James Gunn no fue responsable de introducir a su esposa. Básicamente, fue el único remedio restante para mantener la idea viva.
Desde que Black Adam fracasó en la taquilla, muchos analistas señalaron la estrategia de La Roca como culpable de la baja recaudación ($393 millones de dólares contra un presupuesto de $195). Se mencionó que, la mejor idea, era enfrentar al “Hombre de Negro” con Shazam, y después darle su película individual. De esa forma, se entendería la relación de ambos personajes con el DCEU. Además, sus historias podrían formar una gran mitología digna de la pantalla grande.
Ahora que Shazam 2 también se convirtió en un fracaso, La Roca vuelve a sonar como uno de los causantes del mismo, principalmente por su renuencia a formar un universo más grande. Para bien o para mal, ambas películas enterraron cualquier posibilidad de ver una secuela. James Gunn confirmó hace unos meses que Black Adam no forma parte de su plan en DC durante los próximos años. Y la terrible recaudación de Shazam 2 prácticamente confirma que el personaje pasará al olvido al menos por unos años.
Sin embargo, queda una pregunta en el aire. Si lo mencionado en el artículo es cierto, ¿cómo es que La Roca pudo tener tanto derecho sobre los personajes cercanos a su Black Adam, de tal manera que pudiera limitar sus apariciones? Dada su popularidad en redes sociales y sus buenos resultados en la industria, no suena descabellado pensar que la antigua directiva de DC en cine realmente lo veía como el salvador de su franquicia.
¿Ustedes qué opinan? ¿Creen que si Black Adam se hubiera encontrado con Shazam, ambas películas habrían tenido un mejor resultado en taquilla?
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