Cuaron-del-Toro-Inarritu-amistad

Alfonso Cuarón, Guillermo del Toro y Alejandro G. Iñárritu comparten las claves de su amistad que les llevaron al éxito en Hollywood

Cuaron del Toro Iñárritu amistad

Además de poner a México en alto, Alfonso Cuarón, Guillermo del Toro y Alejandro González Iñárritu comparten una amistad desde hace décadas. Aun cuando ninguno de ellos era conocido por sus aportaciones al séptimo arte, los tres ya compartían historias, consejos, y sobre todo, sueños en común. Dicha amistad se volvió aún más fuerte con el paso del tiempo, y a pesar de sus complicadas agendas, siguen estando el uno para el otro cuando es necesario.

En la actualidad, los tres directores ya acumulan varias nominaciones y triunfos en los Óscar por su excelente filmografía. Lo que antes parecía un sueño, hoy es una realidad: son de los cineastas más aclamados y respetados por la industria hollywoodense, un historial de éxitos los rodea, y son vistos por muchos actores, como personas con las que les gustaría trabajar.

En una charla para Deadline, el trío, que se hace llamar “Los Tres Amigos”, habló sobre lo que ha acontecido en su carrera cinematográfica desde hace más de 30 años. Ha habido triunfos, fracasos y momentos difíciles, pero, ante todo, una amistad que los ha motivado para seguir adelante.

“Alfonso y yo nos conocimos en los 80s”, menciona del Toro. “Habíamos escuchado el trabajo del otro por amigos en común. Y recuerdo pensar: ´¿Quién es este tipo que a todos les gusta? ¿Por qué a todos les agrada?´ Nos conocimos en la sala de espera de La hora marcada, un programa en el que yo iba a realizar los efectos de maquillaje y Alfonso escribía y dirigía. Recuerdo haberle dicho: ´Mira, haré el maquillaje si me dejas dirigir y escribir algunos episodios´”, comentó.

Amores perros hizo que Iñárritu y del Toro comenzaran a trabajar juntos

El encuentro entre Iñárritu y Cuarón se dio unos años después, cuando el segundo se preparaba para dirigir Grandes esperanzas. Para Iñárritu, Cuarón ya era “todo un rockstar”, y es que su nombre ya era conocido en la industria hollywoodense. Hasta ese momento, el único contacto que tenían era a través de Emmanuel “El Chivo” Lubezki.

“A Guillermo [del Toro] lo conocí en el 99, cuando editaba Amores perros. La película ya estaba terminada, pero Guillermo y yo pasamos tres o cuatro días en el estudio discutiendo la película. Él trató de sacar un poco de conciencia de este tipo terco. Y supongo que tuvo éxito, porque esa es la película tal como la conocen ahora”, añadió Iñárritu.

Este tipo de dinámicas fue, precisamente, lo que hizo cada vez más sólida su amistad. El talento de los Tres Amigos es indiscutible, pero aun con ello, permiten la retroalimentación de sus colegas para perfeccionar cada una de sus obras. Es cierto que cada uno de ellos tiene un estilo muy particular a la hora de dirigir, pero esa diferencia es lo que les ha permitido llegar a semejante nivel de éxito.

Pueden hablar de nuestras diferencias, pero yo las veo más como complementos. Esto en el sentido de que estamos muy conscientes de nuestras limitaciones y fortalezas. Tenemos una forma de hacer cine, pero cada uno de nosotros entiende de dónde viene el otro. Cuando hay desacuerdos, por ejemplo, si quiero hacer algo en específico, y uno de ellos pone una bandera roja en ello, sé inmediatamente que debo ser cuidadoso con ello”, mencionó Cuarón.

Alfonso Cuarón dirigiendo Roma, película que le hizo ganar su segundo Óscar como director

Aún cuando mantienen una profunda amistad, Cuarón, del Toro e Iñárritu saben que eso pasa a segundo plano cuando se trata de retroalimentar el trabajo del otro. La amistad no va a hacer que una película sea mejor o consiga más premios. Lo que sí lo hará, es la objetividad. Por ello, no se guardan ningún comentario y esa retroalimentación es “brutal“. Un tipo de sinceridad que, los tres concuerdan, es difícil de encontrar en la industria.

“Cuando Alfonso dice ´brutal´, él se refiere a algo brutal. Les podrías enseñar un corte, y ellos se harán a un lado para decir: ´Mira, no importa lo que creas que esto sea, esto es lo que te dirá la audiencia, y esto es lo que te dirán los críticos. Cámbialo o no, pero eso es lo que debes aceptar´“, agregó del Toro.

Actualmente, los Tres Amigos han ganado el Óscar a Mejor dirección. Y aunque no tienen un proyecto reciente donde hayan compartido su talento, sí han trabajado en conjunto dentro de varios proyectos. El trío estuvo involucrado en la producción de Rudo y cursi. “Es más que solo producir. Me siento inspirado por ellos”, dijo del Toro. Cada proyecto de uno de ellos inspira a los otros dos a replantearse y elevar su juego para la siguiente ocasión.

“Nos echamos muchas flores, pero es cierto que lo bueno de inspirarse en tus amigos es que no te provoca celos sino asombro. Guía y activa tu propio sentido de identidad y te empuja hacia lo siguiente que debes explorar“, reflexionó Iñárritu. “Creo que también es cierto que estamos en un momento de nuestras carreras en el que estamos personificando lo que hemos aprendido a lo largo de los años“.

Lo más importante de todo, es que los tres han realizado la mayoría de sus proyectos con presupuestos mínimos. Claro que saben trabajar con grandes cantidades de dinero, pero su talento no se ve limitado por la disponibilidad del efectivo. Iñárritu lo define con una frase que inspiró al realizador de La forma del agua: “Un presupuesto es un estado de ánimo”.

Pinocho, la más reciente película de Guillermo del Toro, fue una de las cintas mejor recibidas en 2022

Evidentemente, la relación entre estos cineastas les ha permitido llegar muy lejos, no solo en términos de territorio, sino también de ideas. Con semejante trayectoria, y con muchos años por venir, el trío sabe que aún hay muchas historias por contar. A nadie del público o de la industria le sorprendería ver a Cuarón, del Toro e Iñárritu como la inspiración para una nueva generación de jóvenes directores.

“El único ejemplo en el que puedo pensar, de directores que se conocen tan bien, es Steven Spielberg, Francis Ford Coppola, y Martin Scorsese. Pertenecen a la misma generación, al mismo país, la misma cosa. Nosotros tres compartimos las mismas circunstancias, venimos del mismo mundo, y entendemos profundamente quienes somos, no solo como cineastas, sino como personas”, dijo Iñárritu.

Vista en retrospectiva, la amistad de Cuarón, del Toro e Iñárritu es una que sirve como ejemplo del verdadero apoyo. Aunque al principio conseguir el éxito se veía como una meta complicada, hoy es algo que pueden contar como una meta alcanzada. Sin embargo, eso no los ciega. El cine que realizan no pretende grandes recaudaciones, sino retratarlos en la pantalla grande. Guillermo del Toro lo resume de una forma perfecta: “Nuestras películas son una biografía de cada uno de nosotros”.

“La meta de nuestras conversaciones ni siquiera es sobre las películas, sino lo que estas van a significar en nuestras vidas, y cómo seguirán construyendo las vidas que queremos. Eso es lo más importante, compartir el éxito y los fracasos con el otro, entender cómo eso nos impacta, y lo que aprendemos de ello”, añadió Cuarón.

Por ahora, pueden disfrutar de los más recientes trabajos de Iñárritu y del Toro. BARDO: Falsa crónica de unas cuantas verdades, y Pinocho, se encuentran disponibles en Netflix. Por su parte, Cuarón se encuentra ajustando detalles para el estreno de Disclaimer, su primera serie, la cual llegará a Apple TV Plus.

La entrada Alfonso Cuarón, Guillermo del Toro y Alejandro G. Iñárritu comparten las claves de su amistad que les llevaron al éxito en Hollywood se publicó primero en Cine PREMIERE.