nop_jordan_daniel

¡Nop!, la cultura del espectáculo y el engaño en las nubes

nop_jordan_daniel

Desde que debutó con ¡Huye!, el público que sigue el trabajo de Jordan Peele siempre espera que sus películas incluyan alguna crítica o comentario sobre aspectos de la sociedad. En ¡Huye! habló de racismo y en Nosotros sobre privilegios. En este respecto, su tercer largometraje, ¡Nop!, parece alejarse de ese tono crítico que le dio el Óscar a Mejor guion por su ópera prima. No obstante, esto no es algo malo. Y es que Peele ha dejado claro que no busca ser el “director que lanza críticas sociales con sus películas”. 

La historia de ¡Nop! nos presenta a Otis Hayword Sr., el dueño de Haywood’s Hollywood Horses Ranch, uno de los contados lugares donde las producciones de Hollywood puede recurrir para utilizar caballos reales en comerciales, cine y series de televisión. A pesar de que hoy la mayoría de los proyectos prefieren utilizar CGI, Haywood’s sigue en pie. Desafortunadamente, Otis muere por una misteriosa moneda que cae del cielo y su hijo O.J. (Daniel Kaluuya) debe hacerse cargo. Para ayudarle un poco, su hermana Emerald (Keke Palmer), regresa temporalmente a vivir al rancho.

¡Nop! aborda el terror a lo desconocido, pero también el instinto básico para reaccionar ante el peligro. Y no sólo desde una perspectiva humana, sino la de caballos o chimpancés por igual.

“Escribí ¡Nop! en el 2020 durante la pandemia”, señala Peele en las notas de producción de la película. “Eran tiempos locos en muchos sentidos. La película es una reflexión de todos los horrores que ocurrieron entonces y que aún continúan. Era mi escape del día a día de lo que pasaba y quería ofrecerle eso mismo al público”.

El espectáculo del miedo

El terror a lo desconocido y al cambio de nuestro entorno es uno de los elementos clave para entender el tercer largometraje de Peele. Y esto se comprende mejor gracias a una secuencia que ocurre al inicio y a la mitad de la película. En ésta, un miembro de un programa de televisión reacciona de forma particular ante un cambio en su entorno. Esto provoca caos y tragedia para el resto de los personajes.

A lo largo de su filmografía, e incluso como escritor y actor de la serie de sketches Key and Peele, el director ha encontrado la manera de poner el dedo en la llaga y lanzar más de una crítica hacia la sociedad, la industria, el género o cualquier aspecto que Peele crea pertinente hacer notar. ¡Nop! no sólo presenta una crítica al viejo, pero romántico, Hollywood (representado por el rancho Haywood), sino al nuevo Hollywood: un monstruo hambriento por generar contenido en todo momento. Por ser visto y por trascender. 

También representa una crítica hacia la constante búsqueda de espectáculo en esta «sociedad de entretenimiento». Después de todo, vivimos un momento en el que cada fin de semana hay un evento mediático agendado, planeado y ejecutado. Así sea toda una temporada de Stranger Things, una nueva megaproducción de Marvel o un multimillonario episodio de La Casa del Dragón, parece ser que cada contenido tiene que superar al anterior en términos de tamaño, alcance y vistas. Así lo señaló Daniel Kaluuya en exclusiva para Cine PREMIERE:

“Creo que parte de nuestra cultura ahora es que somos adictos a estos eventos -cinematográficos, televisivos- porque no estamos cómodos con el silencio o con permanecer quietos. Y como tenemos todo eso enfrente, sentimos que podemos ver todo o escuchar siempre música o un podcast, y siempre vamos a tener todo a nuestro alcance: el estímulo del consumo. Siempre queremos permanecer estimulados, sí creo que como cultura nos obsesiona el espectáculo”.

nop película

Viejo Hollywood vs Nuevo Hollywood

Con cada vez más frecuencia, si la historia de un evento mediático no es lo suficientemente llamativa, creativos y estudios de Hollywood recurren al excesivo uso del CGI. Parece ser que la tirada es que sus grandes explosiones, extrañas criaturas o mundos enteramente creados por computadora, sean lo suficientemente impresionantes para que el público reciba su dosis de espectáculo semanal y que la conversación no se detenga. Pero Peele, con todo y un limitado presupuesto, recurre a lo que algunos de sus colegas como Nolan o Villeneuve continúan haciendo para que no se pierda la tradición: el uso de los efectos prácticos.

“Tenemos que encontrar el balance. Estamos en un punto en el que el exceso de CGI hace que las cosas parezcan una caricatura, ¿sabes? Y no queremos ver dibujos animados”. Nos dice Keke Palmer, desde Los Ángeles. “Pero creo que ahora está pasando más seguido, como lo hizo Jordan, he notado que otros cineastas han tomado la opción de ir a la vieja escuela y filmar en cine. Hacer más cosas con efectos prácticos y si es que añaden CGI, lo hacen sólo cuando es necesario. Así hay más balance, porque el CGI es genial cuando se usa para algo específico, pero también quieres tener una calidad de cine, porque eso añade textura. ¡Nop! fue filmada en formato de cine y eso hace una diferencia completa. Es balance y muchos cineastas quieren retomar eso”.

nop película

Asimismo, la película de ¡Nop! es un caso único dentro del cine de género y que recuerda hasta cierta medida lo que hizo Steven Spielberg en los inicios de su carrera con Tiburón. La trama combina aventura con terror y sus protagonistas no son niños, como lo son en muchas series y películas actuales. En aquellas, las decisiones creativas parecen tomadas únicamente pensando en qué públicos/clientes llenarán más la sala al verse reflejados en la pantalla. Peele no recurre a ese truco de poner a los ‘niños valientes’ en turno para que ayuden a los adultos a resolver el problema. 

“Es un grandioso punto el que dices”, nos confiesa emocionado el actor Brandon Perea, quien interpreta a Angel Torres, empleado de una tienda de electrónicos. “Nunca lo había pensado así desde ese sentido y es muy bueno que lo menciones. Es increíble ver adultos lidiando con ese tipo de problemas y puedes ver cómo reaccionamos ante estas emergencias de una forma equivocada por igual. Tanto hacerlo a la mala como a la buena. Hay muchas capas que se le pueden añadir a eso”.

Con un debut tan robusto y galardonado como lo fue ¡Huye!, parecía imposible que Peele pudiera mantener esa calidad. La tesis de Nosotros versaba en los grupos privilegiados sobre la invisibilidad del resto, pero no hay que dejarse engañar con ¡Nop!, que parece una simple película de terror, sci-fi y aventura, sencilla y directa. Dos hermanos quieren grabar un OVNI y así pasar a la historia. Pero como suele ser de engañoso el cielo, hay veces que observamos nubes casi negras y nunca llueve, mientras que en ocasiones la nube más inocente trae consigo el diluvio. Así sucede con esta historia. Bajo los temas de la ciencia ficción y el terror, hay mucho que digerir sobre la naturaleza de los seres vivos, el hambre por el espectáculo, ser vistos y preservar en un mundo donde todo es digital.

nop película

¿Y por qué la película se llama ¡Nop!?

“Siempre me gusta meterme en la cabeza de la audiencia”, señala Peele. “Creo que hay mucha gente que no le gusta ver películas de terror y no quieren ver algo que es muy oscuro o realmente enfermo. ¡Nop! es una invitación a ese público. Es casi como decirles ‘Hey, te entiendo y esta película será terrorífica, pero hasta el final estaré contigo. Siento que todo mundo tiene un lugar dentro del cine de género. En la comunidad negra tenemos reglas simples y sólo hay ciertas cosas que nos harán decir “¡Nop! ¡Bye! ¡Adiós! ¡Yo me voy!”

¡Nop! ya está en cines de México.

La entrada ¡Nop!, la cultura del espectáculo y el engaño en las nubes se publicó primero en Cine PREMIERE.